miércoles, 5 de enero de 2011

¿Porqué nos fascina tanto el arte y la historia egipcia?

Allá donde va triunfa. Por supuesto. Empezando por las películas de Hollywood, por los hallazgos de los arqueólogos o ponga usted en un museo una exposición de arte egipcio y el éxito, más que garantizado, será multitudinario. Estas fueron las conclusiones sin concluir que saque   con mi amiga: Ana Lucía, profesora ella,  de arte y curadora de un museo peruano cuando íbamos en el avión rumbo a Buenos Aires en días pasados. Me comentó sobre su visita y me la puso como  la última prueba:  "Tutankhamon. La tumba y sus tesoros", en el pabellón 12 de la Casa de Campo de Madrid, España. Y eso que, por ejemplo, su entrada cuesta casi el triple que ver el Museo del Prado. En fin. 

Máscara de Tutankhamón
Lo cierto es que, las exposiciones sobre las fascinantes obras de arte egipcias gozan desde hace muchos años de gran popularidad. ¿Por qué? "Yo creo que se puede resumir en una sola palabra, quizá para su desgracia: el misterio, el halo de misticismo que existe en torno del antiguo Egipto", le dije.
Esta afirmación nos llevo a hablar sobre La maldición más famosa: la de Tutankhamón, durante siglos el misterio ha rodeado todo lo relacionado con el Antiguo Egipto, sus monumentos funerarios, ritos, dioses y faraones aparecen ante nuestros ojos como vestigios de un mundo desconocido. El desciframiento de la piedra Rosetta, que permitió la interpretación de los jeroglíficos, nos ha desvelado algunos de sus enigmas, pero muchos otros quedan hoy por resolver.
Piedra Rosetta

Cuando uno piensa en los faraones de Egipto, Tutankhamon es el primer nombre que viene a la cabeza. Es, sin duda, el más famoso de todos los faraones, precisamente por el misticismo del tesoro que se encontró en su tumba, incluida la conocida máscara de oro. Y por su maldición. Ésta es una de las maldiciones más famosas de la historia. Su difusión ha contribuido a aumentar el halo de misterio y de magia que siempre ha envuelto a los majestuosos monumentos funerarios egipcios.

Tumba de Tutankhamon
Tutankamón era un joven faraón egipcio de la XVIII Dinastía. Llegada la hora de su muerte fue enterrado según sus costumbres, en una tumba rodeado de sus más preciados tesoros y gran cantidad de alimento del que dispondría en su otra vida. En noviembre de 1922, Howard Carter halló en el Valle de los Reyes la momia del joven faraón y sus tesoros intactos. Unos días después del hallazgo, Lord Carnarvon, el promotor de la expedición, murió de neumonía; su perro que se encontraba en Inglaterra, también.

La leyenda estaba servida. La novelista gótica Marie Corelli -tan injustamente olvidada, por cierto- aderezó la leyenda, afirmando que poseía un manuscrito árabe que certificaba la maldición. Pero nada. Fue uno de los primeros casos de la prensa sensacionalista inglesa. El cine -La momia y sus secuelas, al frente- contribuyó también al montaje. Carter, por cierto, murió en 1939 con 65 años.

Sea como sea, sirviéndose del mito, el proyecto presentado en Madrid "Tutankhamon. La tumba y sus tesoros" marca una nueva pauta: como en una novela, los visitantes -sobre todo, niños, el nuevo objeto del deseo expositivo- pueden revivir la emocionante historia de la excavación arqueológica. Y aquí toca, de nuevo, la leyenda. Indiana Jones o la leyenda del héroe arqueólogo.

Indiana Jones, personaje cinematográfico 
Indiana Jones. Un personaje que marcó a una generación, intrépido, audaz, atrevido, temerario? y a veces un patoso con suerte. ¿Qué niño nacido en los setenta y ochenta no se ha acercado alguna vez en su infancia a su madre con una sonrisa en los labios diciendo "mamá, quiero ser arqueólogo".

Y la frase, aunque la gran mayoría de los niños que acuden a ver la réplica de la Tumba de Tutankhamon tan sólo han visto Tutankhamon y el reino de la calavera de cristal ?o sea, ya no es lo que era?, vuelven a pronunciarla nada más salir de la Casa de Campo, que además tiene todos los argumentos de un parque temático, me contó mi amiga Ana Lucía.
Pero seguimos con la incógnita inicial abierta, “ Por los mitos y por la belleza” -  me apresuré a decirle a Ana Lucía - “ El hecho de que el faraón fuera hijo de un dios formaba parte del orden y del equilibrio en el que creían. De que fuera un dios dependían hasta las crecidas del río Nilo y, por lo tanto, su supervivencia. Y el río Nilo era la vida, si no hay Nilo, la vida no existe, así como para los pueblos prehispánicos nuestros el agua era vida”-.

Pero, hay otra clave, desde que en 1964 se expuso en el British Museum la primera gran exposición sobre Egipto: la belleza. Por ejemplo, del busto de Nefirtiti. Los egipcios, sí, fueron los primeros en adorar la belleza y recrearla artísticamente.

Busto de 3.500 años de antigüedad
  de la reina Nefertiti
Un halo de misterio sigue rodeando la escultura policromada de la reina Nefertiti que se conserva en Berlín, un retrato que, 3.500 años después, no ha perdido su enigmática sonrisa -¿de sabiduría, de sensualidad o de desdén?- y ha sido considerado la Mona Lisa de Amarna, la representación emblemática de las maravillas y misterios de una de las épocas más asombrosas de Egipto.

Con Nefirtiti nace la proclama de André Breton: las obras de arte se dividen en dos categorías: las que me gustan y las que no me gustan. Y las egipcias fascinan.

Otra clave es el complejo equilibrio entre la muerte y la eternidad, tan presente en la religión y el arte Egipto. "Nunca un pueblo alguno tuvo para la muerte una actitud más disciplinada, más ordenada que los egipcios", afirmó mi amiga. - Y así es-. El egipcio estaba altamente influenciado por sus creencias en el Más Allá y fundamentalmente por el concepto de eternidad-durabilidad, y fueron estas ideas las que determinaron su producción artística; esto me hizo acordar de las clases de religión y eduartística  que daba a los alumnos del colegio El Bosque en Cali.

El egipcio creía que el alma vive en los alrededores del cuerpo, el difunto era rodeado del ajuar funerario y de ushebits, que son sus dobles y sus ayudantes en la otra vida, por que tienen el poder de animar lo inanimado.

Para el egipcio hay posibilidades de felicidad en la otra vida. En Mesopotamia el muerto lleva una existencia más desgraciada y si es olvidado por sus familiares pasará desgracias en el Más Allá, de ahí la existencia de un arte funerario egipcio frente al arte más severo de Mesopotamia.

En el fondo es, pues, un arte de la felicidad. Si el arte egipcio está influenciado profundamente por la religión, no lo es menos por el centralismo político que trata de exaltar el poder absoluto de los reyes y la grandeza de su imperio.

En el fondo, da igual. Hoy el mercado del arte el legal y, notablemente, el ilegal, aunque el Gobierno egipcio trata de ponerle coto todas las piezas encuentran comprador. "¡Todas!. Existe un mercado para todos los niveles y precios. Tanto los objetos mediocres como las obras maestras siempre encuentran su comprador"- fue mi opinión y es  interesante. "La sobrevaloración o infravaloración a menudo significa que el mercado, o algún segmento de él, fluctúa o es inestable. Al arte egipcio no le afectan las modas, no es víctima de las artificiales manipulaciones de los precios por parte de los anticuarios o de las casas de subastas con la idea de publicitar un producto. El arte egipcio no necesita mucha promoción para ser conocido   "como uno de los mayores logros de la humanidad en la antigüedad".
De extraterrestres, por supuesto, nada de nada, por si quedan dudas, aunque sus atribuciones han contribuido lo suyo a la fascinación. ?Las pirámides las construyeron los egipcios, hay pruebas de sobra. Lo que pasa es que en ciertas publicaciones parece que si no dicen mentiras no venden. Y eso que resultaría igual de curioso explicar la verdad. Sabemos cómo se hicieron. Hay restos y marcas de rampas en muchas pirámides. Pero hay quién ve más lógico que unos marcianos vinieran y se pusieran a poner piedras?

"Bueno se nos paso el tiempo", y como dije al comienzo "sacamos conclusiones sin concluir", tan solo quedamos que siempre será llamativo charlar sobre Egipto. 

حسنا ، نحن قضاء بعض الوقت "، وكما قلت في وقت سابق" نحن استخلاص النتائج من دون ا تختم : "كنا فقط نتحدث دائما عن مصر لافت للنظر



No hay comentarios:

Publicar un comentario